Fue liberada, en Raccoon City, con el propósito de acabar con todos los miembros de los S. T. A. R. S. que quedaban en la ciudad, mientras ocurría el accidente que devastó todo Raccoon City.
Es considerado, la Arma Biológica más letal, peligrosa y fuerte que la Corporación Umbrella haya creado. Fue creado con base de un humano, mide 2.33 metros, y es el prototipo del Tyrant más nuevo, inteligente, y renovado.
Forma Normal
Es un humanoide de 2.33 metros de altura. Porta una gabardina negra y cargadores. Entre sus características se incluyen una cara profundamente marcada con una cicatriz (además posee otras cicatrices de intervenciones fortalecedoras que sus ropas camuflan).
Es extremadamente inteligente, mucho más que el Tyrant que Umbrella había estado utilizando. Usa un lanzacohetes hecho específicamente para él, que es demasiado pesado para que un humano normal lo cargue, y mucho menos lo opere.
Incluso puede hablar, lo que lo diferencia del Tyrant original. La única frase que puede decir es:
¡¡ S. T. A. R. S. !!Lo dice cuando ve a un miembro de los S. T. A. R. S.
Forma Secundaria
Cuando Nemesis recibe mucho daño, se retira para recuperarse. Sufre muchas alteraciones en su recuperamiento, incluyendo el hecho de poder cerrar las heridas muy graves. El resultado es la recuperación de heridas, pero debido al daño y el fracaso se convierten en un Némesis más violento e insistente que usa de forma abusiva su ventaja física. Básicamente, se quita la típica túnica. Sus músculos desarrollados aumentan de tamaño, deja a la vista sus temibles y asquerosos tentáculos (los cuales están repletos del T-virus, por si una de sus victimas llegara a escapar, muera de todos modos), Bajo esta condición de excitación sus tentáculos se sueltan, volviéndose más letal y fluido de lo usual y aumentando su rango de alcance. Némesis no para su ataque aunque acumule heridas serias.
En esta fase, ya no utiliza sus armas tanto como en su forma original, ya que a partir de este cambio, sus letales tentáculos son su arma más usada. Sigue siendo igual de inteligente, solo que más peligroso y letal, como nunca antes.
Forma Terciaria
Némesis, en un momento concreto, perdió su cabeza debido a sus severas heridas, quedando parcialmente desactivado; pero sus nódulos secundarios impidieron su muerte. Incluso medio disuelto al caer en un tanque de procesamiento de residuos, tras haber perdido la cabeza, sobrepasando los límites, obliga a sus tejidos corporales a desenvolverse y mutar de forma que pueda seguir activo.
Rompiendo sus barreras, los tentáculos se enrollan y ligan formando precarios apéndices, ya que había perdido los suyos propios, reconstruye sus órganos y en la abertura donde tenía la cabeza forma una especie de boca y unos precarios ojos explotando al máximo el poder regenerativo de T-Virus.
Cabe resaltar que Némesis perdió su cabeza, y con ella la capacidad de comprender y pensar, y por consiguiente de cumplir su misión. El único hecho por el que ataca persistentemente es por la salvaje necesidad de alimentarse.
Este es el (triste e irónico en mi opinión) final de Némesis T-Type.
Gracias por su atención. ¡No olviden comentar!
Christian D. D. R. se despide
